NOVOS CINEMAS 2020: LA CRÓNICA (II)
El Festival Internacional de Cine de Pontevedra despide su edición más diferente (y difícil) por la situación derivada de la Covid-19, en la que una asistencia presencial limitada y controlada y la posibilidad de seguimiento a través de Filmin permitieron seguir adelante con una iniciativa esencial para acceder en esta ciudad a otros tipos de cine, esos que no siempre consiguen encontrar su sitio en los circuitos de distribución convencionales. En los últimos días del certamen pudimos ver dos de las mejores de las películas españolas del año, gracias a la sección Foco y a la sesión de clausura, y una interesante ópera prima con aroma Sundance. Al final de las reseñas encontraréis el palmarés y mi particular clasificación de lo que he podido ver en esta edición.
DRAMARAMA (2020) de Jonathan Wysocki: la prueba de fuego de la amistad [Sección Oficial]
El Premio del Público de este año fue a parar a esta tragicomedia estadounidense que se inserta en un género más que reconocible como es el cine adolescente, y dentro del mismo, en ese subgénero de misfits, "bichos raros" e inadaptados que tan grandes películas ha brindado históricamente. Con la amistad sincera como núcleo central, Wysocki concentra la acción en un único día y un único lugar en este relato con tintes autobiográficos. Un grupo de amigos aficionados al teatro, a los disfraces y a las fiestas temáticas organizan una gran fiesta de despedida ante el primer gran hito de la vida adulta: el inicio de la universidad y la primera salida del cascarón, en el marco de una comunidad profundamente religiosa.
Un grupo aparentemente sólido y compacto en el que pronto se dejan entrever muchas tensiones, alimentadas por los distintos secretos y rencores que cada uno de ellos agacha. Lo que tendría que ser una celebración la amistad se convierte en una puesta a prueba de la misma, desatada por la presencia de un elemento externo al grupo. Un hábil guión, lleno de sorpresas, y una prometedora selección de jóvenes actores son sus principales fuertes.
EL AÑO DEL DESCUBRIMIENTO (2020) de Luis López Carrasco: radiografía completa de la clase obrera [Foco]
Si Novecento suponía una ambiciosa y completa aproximación al movimiento obrero en el siglo XX desde el punto de vista histórico y épico, el documental de López Carrasco supone un acercamiento íntegro a la clase obrera como entidad sociológica compleja y poliédrica desde lo real, lo local y lo cercano. Un documental ambiciosísimo, que parte de un momento y lugar concretos (los disturbios en Cartagena por los ERE y los cierres de fábricas en 1992), sus recuerdos y secuelas, para expandir el relato a un retrato integral de varias generaciones, sentires e inquietudes, unidos por un único nexo común: la pertenencia, les guste más o menos o se identifiquen en mayor o menor medida con ello, a la clase obrera. Estructurado a lo largo de un día natural y en el lugar por antonomasia de los encuentros sociales en los barrios obreros españoles (el bar), el relato ni glorifica ni demoniza a la clase obrera a partir de mitos, asunciones o ideas preconcebidas, sino que la muestra en toda su complejidad, lo que también incluye, como no podía ser de otra manera, fuertes contradicciones, desde el desclasamiento hasta ramalazos de racismo y xenofobia, totalmente espontáneos.
De alguna manera, el proceso de desmantelamiento industrial que España sufrió a finales de los ochenta y principios de los noventa y la fuerte respuesta social que tuvo que enfrentar ilustran a la perfección las secuelas de la Cultura de la Transición, que nos quiso vender una narrativa de que todo fue muy feliz y bonito mientras las calles vivían unos verdaderos años de plomo. En 1992, año de los Juegos Olímpicos de Barcelona y la Expo del Sevilla, en el que España se vendía al mundo como un país avanzado, próspero, colorido y feliz que había superado las heridas de la dictadura, las calles ardían (literalmente) ante las carencias y consecuencias de ese modelo tramposo que nos habían vendido sin remedio. Al terminar la proyección pudimos intercambiar impresiones con el director (en Twitter recogimos algunos de los puntos más interesantes del coloquio).
MY MEXICAN BRETZEL (2019) de Nuria Giménez: memoria, melodrama y simulacro
La edición 05 de Novos Cinemas se cerró con un ejercicio insólito de estilo, montaje y formato pero también de reflexión sobre la naturaleza de la imagen y sus efectos cognitivos. Nuria Giménez (que también fue miembro del Jurado Internacional) le da la vuelta por completo al metraje encontrado, a las películas domésticas, para proponernos una instancia muy particular de "diario filmado", que adquiere una dimensión literal. El archivo personal de sus propios abuelos le sirvió de material para contarnos la historia de una mujer acomodada, sus vivencias con su marido (y con un amante que no vemos en ningún momento) y sus inquietudes más íntimas, lo que por momentos evoca las formas de un melodrama romántico canónico, al más puro estilo de Douglas Sirk o Los puentes de Madison. Las imágenes (con un grado de conservación asombroso), acompañadas de textos del diario de la protagonista, nos transmiten una sensación de veracidad en la que nos dejamos llevar… para luego revelársenos en última instancia el engaño, al más puro estilo del Fraude de Orson Welles, que aquí además da un giro tanto interno como externo.
Por si la propuesta ya fuese poco desde el punto de vista semántico y discursivo, desde el plano compositivo no es menos rompedora. Para empezar, y principalmente, porque destierra la noción de la voz en off como único recurso posible para incorporar la voz interna del narrador omnisciente como hilo conductor del relato, máxime en uno de tipo introspectivo como este. Pero además, eso permite no sólo jugar con los silencios como recurso expresivo (y reflexivo de cara al espectador) sino también hacer un uso del sonido como mecanismo connotativo y no meramente funcional, de ambiente. La directora, con la que también compartimos un encuentro, confesó que probó con la voz en off pero que, visto el resultado, prefirió descartarla, algo que no puede verse sino como un grandísimo acierto. ¡Pero podréis saber más con la entrevista que le hicimos, que publicaremos mañana!
Palmarés
Premio Novos Cinemas (Sección Oficial): Il n’y aura plus de nuit, Éléonore Weber
Mención especial del Jurado Internacional: Accidental luxuriance of the translucent watery rebus, de Dalibor Baric
Premio Latexos: Anunciaron tormenta, de Javier Fernández
Premio del Jurado de la Crítica: Tal día hizo un año, de Salta Tiziana
Premio del Jurado Joven: The trouble with nature, de Illum Jacobi
Mención especial del Jurado Joven: Il n’y aura plus de nuit, Éléonore Weber
Premio del Público: Dramarama, de Jonathan Wysocki
Lo mejor de Novos Cinemas 2020
1. El año del descubrimiento, Luis López Carrasco
2. Mosquito, Jõao Nuno Pinto
3. My Mexican bretzel, Nuria Giménez
4. Dramarama, Jonathan Wysocki
5. Il n’y aura plus de nuit, Éléonore Weber
6. Lúa vermella, Lois Patiño
Un comentario en «NOVOS CINEMAS 2020: LA CRÓNICA (II)»